#121 – Pequeño alquimista en el ojo del huracán

La Conciencia Crística no es de este mundo. Es algo que está a caballo entre dos mundos, entre dos dimensiones. Una dimensión, ésta, que es real. Y otra, que, PODRÍAMOS DECIR, todavía no existe.

Para que exista, esta otra dimensión, tú tienes que abrir la puerta. Y la puerta la abres con tu Conciencia. Siendo consciente de tu Conciencia.

Porque ella es tu Conciencia Crística.

Estás Aquí y abres la puerta para que entre. Para que penetre en esta Realidad.

Se mezclan las dos cosas: tu Conciencia y la Energía que eres Aquí.

Sí, como el rayo y el trueno…

Tu Conciencia echa un chispazo y tu Energía retumba sin límites.

Y se abre un Espacio dentro del Espacio.

Nacen átomos de los átomos y moléculas de las moléculas.

Y se desencadena una tormenta. Un huracán.

Y Tú Eres el ojo de ese huracán. ¡Un pequeño alquimista en el ojo del huracán!

Oh, cual Moises separando las aguas para que su pueblo pase y escape del enemigo, tú separas la materia ya existente en dos, para que la Nueva Energía penetre en tu Experiencia. Y, aquello que no estaba manifestado, SE MANIFIESTA.

Épico. ¡Sí!

Despierta ese poder hoy. Es un poder sin poder, un poder que no viene del poder, pero que es poderoso.

La Nueva Energía es cuando tú estás presente con tu Conciencia y fusionas esa Esencia con la materia que eres en esta Realidad.

El alquimista en el ojo del huracán debe moverse con la tormenta que está generando.

El ojo es el Punto Cero, eres tú, abriendo dimensiones con tu intención y tu Presencia.

Sin esperar ningún resultado en concreto. Esa fuerza creativa no se puede dirigir con la voluntad mental.

No todavía. No aquí. ¡Esto es algo de otro mundo!

El pequeño alquimista es el que abre la puerta de los potenciales y las posibilidades, cuidando de desplazarse, continuamente, sin salir del ojo del huracán de la tormenta que está creando…

Ah, si se separa, el pequeño alquimista será arrastrado por el huracán de su personalidad humana, de nuevo, y dará tumbos hasta perderse. Y luego tendrá que levantarse de nuevo y volver al ojo del huracán.

Tendrá que volver a su Conciencia. Allí donde está el poder Creador que no tiene poder pero que es muy poderoso.

Que crea mundos y universos y los suelta para que crezcan por si mismos.

Bendita maldición. Maldita bendición.

¿Dónde está el lugar donde se puede usar esta Nueva Energía para la Creación Consciente? ¿Dónde ESTÁN el espacio, sí, y el tiempo en los que eso puede suceder?

No existen. No los hay. Ni espacio, ni tiempo.

¡Tú eres el Espacio y el Tiempo donde eso sucede!

Pequeño alquimista en el ojo del huracán que tienes en tus manos el talismán de la Conciencia Crística capaz de crear aquello que todavía no existe…

Tú.

No me des razones.

Siente la tormenta y el huracán…

Siente el viento levantarse a tu alrededor…

Levanta las manos y abre la materia. ¡PARTE LO DENSO EN DOS Y PENETRA EN ELLO!

Tu Conciencia no es nada. Tu Energía no es nada. Pero juntas, aahh, no te imaginas lo que eso puede representar…

Pueden brotar infinitos universos de este universo. Puedes multiplicar lo que eres por infinito y hacer NACER nuevas Creaciones dentro de la Creación.

Ah, pequeño loco alquimista…

Poco pensabas que tuvieras esta capacidad.

Crea desde el centro de tu Conciencia Ahora.

Quién sabe, quizá el ojo del huracán pronto empezará a responder y se moverá hacia donde tú quieras.

Los rayos de materia, que parten la MISMA materia y que emanan de tu centro, no se si lo sabes, contienen potenciales infinitos…

Respira y ABRE los agujeros por donde tu Conciencia infinita se fusiona con la Energía finita, y ya creada, y la convierte también en infinita.

Maldito pequeño alquimista… ¿Dónde estabas? Te hemos estado esperando.

Muéstranos al Dios que llevas dentro y despierta a nuestro Dios también.

Y que la Creación se expanda Ahora.

Que la temida contracción del Omniverso llegue a su fin y quede revertida.

¡Que nazca la tormenta!

Que el huracan explote y haga mover toda Energía quieta y que se daña a si misma por no querer dirigirse hacia nuevos horizontes…

Ahora.

Vamos, pequeño alquimista. Yo, tu Dios interno, salgo inevitablemente de tus manos y muevo la tormenta hacia nuevos mundos.

Dirígeme y deja que Yo te dirija…

La eternidad nos espera.

Todos los ojos del Universo están puestos en nosotros.

Todos los ojos puestos en nuestro ojo.

Que el rayo y el trueno que somos se expandan.

Y que expandan, con ellos, toda la Creación…

Hoy es el gran día.

Vamos.

La Conciencia Crística, que no es de este mundo, ya está Aquí y ya está hecho.

Ella Ahora es de este mundo y de todos los mundos.

Creados y no creados.

Todos, todos, ilimitados.

----------------------------------
Comparte con tu comunidad:

¿Conectas? Suscríbete

Te enviaré una ALERTA cada vez que publique nuevo contenido. Es completamente gratis y puedes darte de baja cuando quieras.

Haz una donación

6 comentarios en «#121 – Pequeño alquimista en el ojo del huracán»

Deja un comentario

Artículo añadido al carrito.
0 artículos - 0,00